ARTE Y REALIDAD

"El arte, en cierto sentido, es una rebelión contra el mundo en lo que éste tiene de fugitivo e inacabado: no se propone, pues, sino dar otra forma a una realidad que sin embargo, está obligado a conservar, porque es la fuente de su emoción. En este sentido todos somos realistas y nadie lo es. El arte no es ni el repudio total de lo que existe, ni la aceptación total de lo que existe. Es, al mismo tiempo, repudio y aceptación. Y por esto, no puede ser sino un desgarramiento perpetuamente renovado. El artista encuentra siempre en esta ambigüedad, incapaz de negar lo real y, sin embargo, eternamente dedicado a discutirlo en lo que a lo real tiene de eternamente inacabado"

Albert Camus (1913-1960) "El artista y su tiempo"

El arte se convierte en un animal que mastica constantemente la realidad para provocar su progreso y poder seguir masticándola constantemente.

TU FORMA DE QUERERME

La forma de querer tú

es dejarme que te quiera.

El sí con que te me rindes

es el silencio. Tus besos

son ofrecerme los labios

para que los bese yo.

Jamás palabras, abrazos,

me dirán que tú existías,

que me quisiste: Jamás.

Me lo dicen hojas blancas,

mapas, augurios, teléfonos;

tú, no.

Y estoy abrazado a ti

sin preguntarte, de miedo

a que no sea verdad

que tú vives y me quieres.

Y estoy abrazado a ti

sin mirar y sin tocarte.

No vaya a ser que descubra

con preguntas, con caricias,

esa soledad inmensa

de quererte sólo yo.

Pedro Salinas

BELLEZA Y "CONTAMINACIÓN"

La belleza debida a la compenetración de un conjunto de circunstancias cuya relación realiza su objetivo de ser bello es imposible de teorizar para el llevado a su práctica. Una pequeña modificación del sistema puede volver un conjunto horrible o incluso convertirlo en precioso sin que ninguna de estas prácticas sea universal.

Lo bello juega con su entorno fijando unas relaciones perceptibles y poco visibles para el mirón pero que pueden llegar a ser observadas por alguien con interés. Incluso la ignorancia y la contaminación por lo horrible pueden llevar a que ciertos individuos no observen belleza alguna donde la hay y viceversa. De esta manera la belleza es algo complicado y el contacto con ella lo tendremos en mayor o menor grado según nuestra educación.

Educación no entendida como puro aprendizaje desde el estudio sino como el conjunto de experiencias vividas. Al igual que la belleza va ligada a su entorno nuestra capacidad de relación con ella será consecuencia del nuestro. La teoría de la “contaminación” existe entendiendo que el bombardeo constante de información nos forma como personas, dejándonos cicatrices mentales que abren o cierran ventanas a inquietudes en nuestro pensamiento.

De esta forma evitad lo horrible, no lo miréis, apreciad lo bello y observadlo, porque nos ayudará a ser mejores y a crear belleza para los demás.

ORNAMENTO Y DELITO

"¡Pensad! El camino de la cultura es un camino que va desde el ornamento hasta la carencia de ornamento. La evolución de la cultura equivale al alejamiento del ornamento del objeto de uso. El ornamento encarece por regla general el objeto…si no hubiera ornamentos en este mundo (cosa que ocurrirá quizás dentro de miles de años) el hombre tendría que trabajar cuatro horas y no ocho, ya que la mitad del trabajo se pierde hoy en ornamentos.
El impulso de ornamentarse el rostro es el primer origen de las artes plásticas. Es el balbuceo de la pintura. Todo arte es erótico. El primer ornamento que surgió, la cruz, era de origen erótico. Una raya horizontal, la mujer, una raya vertical, el hombre que la penetra. Pero el hombre de nuestro tiempo que a causa de un impulso interior pintarrajea las paredes con símbolos eróticos es un delincuente o un degenerado. Obvio es decir que en los retretes es donde este impulso asalta con mayor violencia a los propensos a tal degeneración. Se puede medir el grado de civilización de un país atendiendo a la cantidad de garabatos de las paredes de sus retretes”

Adolf Loos "Escritos II"

THE ORIGIN OF LOVE

¿LA CIUDAD POTEMKIZADA?

Secuencia en las escaleras del puerto de Odesa dirigida en 1925 por el cineasta ruso Sergéi Eisenstein. El humano creador del objeto destructor. Infalible trampa mortal y fracaso destructor del urbanismo.

(H)ACHE

¿En qué momento el artista deja de ser un objeto y pasa a ser un sujeto en el teatro? ¿Cuál es el momento del arte y de qué manera debe manifestarse? ¿Dónde debe parar? ¿En qué punto la experiencia artística deja de serlo? La obra de arte pierde aquí su gramática. Ésta ha sido desmontada. Es necesario preguntarse en qúe instante de esta escena deja de haber obra artística.